viernes, 16 de octubre de 2009

DOCTRINA JUSTICIALISTA


La Unidad Básica es el nervio motor, centro del quehacer justicialista; es trinchera del sentir peronista, donde hombres, mujeres, jóvenes del Pueblo entregan su tiempo, brindan sus hogares colaborando con el hacer permanente del Movimiento Justicialista.
La Unidad Básica no reconoce paternidad de dirigente alguno, por el contrario, el trabajo en general, el trabajo político se ennoblece y dignifica día a día.
Es un escenario más donde el Pueblo participa desde el histórico y protagónico rol que asumiera un 17 DE OCTUBRE, donde se encuentran CONDUCTOR Y PUEBLO. El Pueblo laborioso reclamó su lugar en la Historia nacional.
En las Unidades Básicas, hombres, mujeres y jóvenes escriben la Historia en la fragua diaria del trabajo y fiel a los principios de la DOCTRINA NACIONAL JUSTICIALISTA, humanista y cristiana, teniendo como guía la Bandera Azul y Blanca.
Todo sin olvidar que “el Movimiento Nacional Justicialista es de todos los que lo formamos y defendemos; allí radica el derecho que cada peronista tiene de sentir y de pensar para el beneficio común”.
“Que todos sean partícipes del destino común, pero ninguno instrumento de la ambición de nadie”, sabio apotegma del Gral. PERÓN que encierra una verdad que no debemos soslayar.
Comprometido siempre dentro del accionar del Movimiento Nacional Justicialista – San Luis – también en el marco de su herramienta electoral, el Partido Justicialista, en su momento.
Pero, no es menos cierto que en graves circunstancias políticas que ha vivido nuestro Movimiento, sus dirigentes, hombres, mujeres, jóvenes proscriptos, incluso de la denominación partidaria, han utilizado otras herramientas electorales para participar en elecciones provinciales y nacionales, que en la actualidad se repite, reitero, en el orden nacional y provincial.


JULIO CÉSAR NIÑO
Integrante de la “AGRUPACIÓN 1° DE JULIO” de
MOVIMIENTO NACIONAL JUSTICIALISTA
SAN LUIS

CONMEMORAMOS EL DIA DE LA LEALTAD`POPULAR

El 17 de octubre de 1945 se produjo un hecho que estableció una bisagra entre dos argentinas, una sintetizada por quienes cantaban “sin galera y sin bastón, los muchachos de Perón”, la otra: la de galera y bastón, la que hablaba del “aluvión zoológico”, de “el sustrato de la patria sublevada”, al referirse al pueblo que se encaminaba en forma irrefrenable en búsqueda de su líder, o como decía la intelectualidad comunista "El malevaje peronista, repitiendo escenas dignas de la época de Rosas”. Los primeros — la oligarquía tradicional — demostraban su eterno desprecio hacia quienes, ellos mismos, sometieron a la pobreza durante décadas; los segundos “grandes lectores e intérpretes” de la historia, en algo no se equivocaron, con la caída del Brigadier Gral. Juan Manuel de Rosas se fundó la Argentina exterior, la que miraba hacia Europa, la de los cipayos y vendepatrias.

La Agrupación 1º de Julio, 64 años después de aquella Gesta Popular invita al pueblo a reflexionar para entender claramente que quienes jamás pudieron derrotar nuestra doctrina, usaron el antiguo axioma “Si no puedes vencerlos, únete a ellos”, y hoy ataviados de peronistas, simulan sustentar nuestras banderas, pero en los hechos, ya sin galeras ni bastones, no pueden ocultar su verdadera estirpe de “gorilas” disfrazados.

miércoles, 5 de agosto de 2009

POR QUÉ SOY PERONISTA por Eva Perón

El peronismo no se aprende ni se proclama, se comprende y se siente, ha dicho Perón.
Por eso es convicción y es fe. Es convicción porque nace y se nutre en el análisis de los hechos, en la razón de sus causas y de sus consecuencias. Tiene el empuje y la dinámica de la historia en marcha. Es la conciencia hecha justicia que reclama la humanidad de nuestros días. Es trabajo, es sacrificio y es amor, amor al prójimo. Es la fe popular hecha partido en torno a una causa de esperanza que faltaba en la Patria y que hoy proclama el pueblo en mil voces distintas en procura de una libertad efectiva nunca alcanzada, a pesar del dolor y del esfuerzo de este glorioso pueblo de descamisados.
Cómo las mujeres argentinas podrían desertar de esta causa de todos?
En la lucha todos tenemos un puesto y esta es una lucha abierta por el ser o no ser de la Argentina. Luchamos por la independencia y la soberanía de la Patria, por la dignidad de nuestros hijos y de nuestros padres, por el honor de una bandera y por la felicidad de un pueblo escarnecido y sacrificado en aras de una avaricia y un egoísmo que no nos han traído sino dolores y luchas estériles y destructivas.
Si el pueblo fuera feliz y la Patria grande, ser peronista sería un derecho; en nuestros días, ser peronista es un deber. Por eso soy peronista.
Soy peronista, entonces, por conciencia nacional, por procedencia popular, por convicción personal y por apasionada solidaridad y gratitud a mi pueblo, vivificado y actuante otra vez por el renacimiento de sus valores espirituales y la capacidad realizadora de su jefe: el general Perón. Mi dignidad de argentina y mi conciencia de ciudadana se sublevó ante una patria vendida, vilipendiada, mendicante ante los mercaderes del templo de las soberanías y entregada año tras año, gobierno tras gobierno, a los apetitos foráneos del capitalismo sin patria y sin bandera.
Mi solidaridad con el pueblo, cuya callada epopeya he sentido en mi carne y he sufrido en mi sensibilidad, reafirma mi peronismo. Porque he vivido los problemas del movimiento, su difícil gestación, su desenvolvimiento y la victoria final de la Revolución y porque he pulsado el amor apasionado que el general Perón alienta por su pueblo y por sus vanguardias descamisadas, es que me he convertido en humilde de esta causa del pueblo, un soldado con una fe inquebrantable en el éxito y con un deseo irrefrenable de quemar mi vida para alumbrar el camino de la liberación popular.
Soy peronista porque veo al general Perón levantarse al amanecer y agotar su salud en interminables jornadas para proveer al bienestar de su pueblo; soy peronista porque gradúo con su fatiga la felicidad de su espíritu por llevar alegría y dignidad a los trabajadores argentinos; soy peronista porque me ha sido concedida la felicidad de compartir sus luchas, de sufrir sus dolores de vivir sus alegrías y de alimentar sus esperanzas, en un futuro mejor para todos los que trabajan y para todos los desvalidos, de quienes nadie se acordó hasta que él llamó al pueblo a la realidad de nuestra patria. Soy peronista, en fin, por convicción y por sentimiento, por confianza en la bondad y en los esfuerzos de los descamisados, en esta lucha por la total independencia económica de la Patria, por nuestra completa liberación y por nuestra absoluta y limpia soberanía.
Este peronismo mío se ha retemplado en la lucha, se alimenta de ella y se afirma en la fe.
Tiene la fuerza incontenible de las causas justas. Se ha forjado en la dignificación del trabajo, en la humanización del capital, en la protección al desvalido, en la prodigiosa multiplicación de escuelas y hospitales, en la potencialidad de las fábricas levantadas por la Revolución, en las mejoras al obrero del campo. Este peronismo mío se ha forjado y se afirma en este mismo lenguaje, que uso para definirlo, que es lenguaje de pueblo y que choca y desagrada a los que usan el lenguaje de la mentira coligada. En este mismo lenguaje, como lo hago ahora, seguiré hablando a los descamisados de mi patria desde las columnas de "Democracia

jueves, 30 de julio de 2009

CODIGO DE ETICA "AGRUPACION 1º DE JULIO"

Porque creemos en una palabra que parece haberse borrado de los diccionarios de mucha gente y que aparece apenas en los libros, despojada de la práctica cotidiana, es que hemos acordado un Código de ética que restaure los valores que jamás debimos permitir que en nombre del neoliberalismo se dejaran de lado.



FUNDAMENTACION

Adherir a un código de ética no es ni más ni menos que acordar reglas de buena convivencia que aseguren la interrelación entre quienes participan de un mismo espacio, de algún modo es aventar, al menos desde lo moral, la incursión en un espacio determinado, de aquellos que por la tendencia de sus intenciones, desertarán fácil y rápidamente de los postulados a los que se han comprometido adherir quedando en evidencia sus verdaderos propósitos.

Sería demasiado ingenuo creer que alguien no pueda violar las normas establecidas, de hecho el Hombre vive infringiendo pactos y acuerdos con sus semejantes, pero solo las reglas de juego claras y el cumplimiento irrestricto del espíritu que las conforma, hacen posible distinguir al hombre probo de aquel que no lo es.

COMPROMISO DE ADHESIÓN A ESTE CODIGO

Los abajo firmantes en nombre de nuestro honor nos comprometemos a cumplir en forma irrestricta e inexcusable los postulados establecidos en éste Código de Etica de la Agrupación 1º de Julio a saber:

Parte I

Sobre los principios rectores

1. Seremos leales a la Patria y a los valores de la nacionalidad por encima de cualquier interés personal o sectorial.
2. Respetaremos y de lo que nosotros dependa, haremos respetar la Constitución Nacional, leyes y reglamentos establecidos por el Estado Democrático.
3. Defenderemos y reafirmaremos el régimen democrático y la forma de gobierno republicana y federal.

Parte II

Sobre la persona y su comportamiento dentro de la agrupación

4. El compañero es la persona más importante de nuestra Agrupación
5. Nos comportaremos con respeto y buena fe con nuestros
compañeros.
6. Actuaremos sin discriminación alguna.
7. Velaremos por el buen nombre de la Agrupación, dentro y fuera de ella
8. Fomentaremos un clima de comunicación basado en el respeto, la
cooperación y el trabajo en equipo.
9. Aportaremos capacidad personal, orden y esfuerzo requeridos para
cumplir los objetivos y metas.
10. Protegeremos los bienes de la agrupación y haremos lo necesario
para aumentarlos.
11. Actuaremos con justicia y honestidad.
12. Cuando nos cupiere manejar fondos de la Agrupación lo haremos con
austeridad y transparencia.
13. Respetaremos toda confidencialidad que haga a la seguridad de nuestra Agrupación o de sus afiliados
.
14. Evitaremos incurrir en situaciones de conflicto de interés, real o potencial.
15. Nos comprometemos a que toda información difundida por la Agrupación será completa, transparente, comprensible y precisa, permitiendo a los destinatarios disponer de todo el conocimiento necesario para la toma de decisiones respecto a las relaciones a establecer dentro de aquella.




Parte III

De los militantes de la causa de la Agrupación

16. La militancia política, en cualesquiera de sus formas y niveles, exige solvencia moral, por lo tanto como militantes de la Agrupación asumiremos cabalmente las normas de la más acendrada moralidad pública, y le daremos a nuestras acciones el sentido irrenunciable de una cuestión de honor.
17. Militar en la Agrupación 1º de Julio es aceptar la causa Justicialista que es la causa del pueblo tal como lo expresaba el padre de la doctrina, el Gral. Perón.
18. Como militantes y por lo tanto posibles candidatos a ocupar cargos públicos, nos comprometemos a conducirnos en cada momento, de acuerdo con los principios de Doctrina del Partido Justicialista encaminando nuestras acciones a cumplir el programa de gobierno que ofrezcamos a los ciudadanos.

Parte IV

De la designación a cargos electorales y el ejercicio en el cargo

19. Como integrantes de la Agrupación podremos aspirar legítimamente a ocupar un cargo electoral pero solo se podrá acceder a éste respetando los métodos democráticos establecidos en los estatutos de la Agrupación y competiremos leal y limpiamente,

19. Nos comprometemos a desempeñar el cargo con lealtad a la Patria, a la comunidad que servimos y con decisión inquebrantable de mantener la adhesión a la Agrupación y/o partido político que nos promoviere.
20. Ninguno de los que adherimos a los postulados de este Código de Etica, que cumpla un cargo electoral obligará a colaboradores o ciudadanos a afiliarse a la Agrupación a cambio de otorgarle algún beneficio laboral, social o económico.

21. Ninguno de los miembros de la Agrupación podrá integrarse a otro partido político que no sea el que de ésta emerja o apoyare fehacientemente y por lo tanto sostenga los postulados de nuestra causa. Si lo hiciere, quedará automáticamente excluido de nuestra Agrupación.

22. Nos comprometemos a reconocer nuestros cargos partidarios y/o electivos, no como propios sino como un alto honor que nos confirió nuestra Agrupación y/o partido, encarnados en la voluntad democrática de nuestros compañeros.

23. Nos comprometemos, cada vez que detentemos un cargo electivo, a realizar un aporte pecuniario mensual para el mantenimiento de la causa sostenida por nuestra Agrupación y/partido.

24. Nos comprometemos a ofrecer en la atención al ciudadano, igualdad de oportunidades, sin discriminación alguna que pudiera dar lugar a trato diferenciado o preferencial.

25. En el cumplimiento de la función pública para la que fuéramos electos, brindaremos atención cordial, pronta, diligente, expedita y respetuosa con la convicción de que un servidor público es un mandatario del pueblo y a él se debe y responde. Habremos recibido un mandato para servir y no para ser servidos, por lo cual, todo ciudadano merece esa atención, tanto de parte nuestra como de nuestros colaboradores.

miércoles, 29 de julio de 2009

LAS 20 VERDADES PERONISTAS

Como consideramos un imperativo retornar a la Doctrina, creemos necesario recordar estos veinte conceptos que perfilan la razón de ser de nuestra ideología:

La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés: el del Pueblo.

El Peronismo es esencialmente popular. Todo círculo político es antipopular, y por lo tanto, no es Peronista.

El Peronista trabaja para el MOVIMIENTO. El que en su nombre sirve a un círculo, o a un caudillo, lo es solo de nombre.

No existe para el Peronismo más que una sola clase de hombres: los que trabajan.

En la NUEVA ARGENTINA el trabajo es un derecho, y es un deber, por que es justo que cada uno produzca por lo menos lo que consuma.

Para un Peronista no puede haber nada mejor que otro Peronista.

Ningún Peronista debe sentirse más de lo que es y menos de lo que debe ser. Cuando un Peronista comienza a sentirse mas de lo que es, empieza a convertirse en oligarca.

En la acción política la escala de valores de todo Peronista es la siguiente: Primero la Patria, después el Movimiento y luego los hombres.

La política no es para nosotros un fin, sino solo el medio para el bien de la Patria, que es la felicidad de sus hijos y la grandeza Nacional.

Los dos brazos del Peronismo son la Justicia Social y la ayuda Social. Con ellos damos al Pueblo un abrazo de justicia y amor.

El Peronismo anhela la Unidad Nacional y no la lucha. Desea héroes pero no mártires.

En la NUEVA ARGENTINA los únicos privilegiados son los niños.

Un Gobierno sin doctrina es un cuerpo sin alma. Por eso el Peronismo tiene una doctrina política, económica y social: El JUSTICIALISMO.

El Justicialismo es una nueva filosofía de la vida, simple, practica, popular, profundamente Cristiana y profundamente Humanista.

Como doctrina política, el Justicialismo realiza el equilibrio del derecho del individuo con el de la comunidad.

Como doctrina económica, el Justicialismo realiza la Economía Social, poniendo el capital al servicio de la Economía y ésta al servicio del bienestar social.

Como doctrina social, el Justicialismo realiza la Justicia Social, que da a cada persona su derecho en función social.

Queremos una Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana.

Constituimos un Gobierno centralizado, un Estado organizado y un Pueblo libre.

En esta tierra lo mejor que tenemos es el Pueblo.